lunes, noviembre 19

Una breve crítica a la educación en el Perú

La fuente de riqueza de un país tuvo diversos enfoques para determinados espacio-tiempos del proceso histórico, estos enfoques pasaron desde el bullonismo, el cual sostenía que la fuente de riqueza de un país consistía en la acumulación de metales preciosos, como también el enfoque por el cual se creía que la fuente de riqueza de un país se encontraba en los recursos naturales que poseía. Actualmente, es sabido que la fuente de riqueza de una nación se encuentra en sus habitantes, en los ciudadanos de una nación, esto queda demostrado en la práctica, ya que países con escasos recursos logran niveles de bienestar altos. Ante esta actual realidad, ¿qué esta pasando con el Perú?, ¿hacia dónde nos dirigimos, teniendo en cuenta cuál es norte a seguir?

Ya pasaron los tiempos en los cuales se creía que el bienestar de un ciudadano era su peculio, es decir su ingreso disponible, actualmente la literatura y la práctica sugiere que la calidad de un ciudadano depende fundamentalmente de tres cosas: la esperanza de vida, ingreso y educación. Estos tres elementos se fusionan en el índice de desarrollo humano, desarrollado inicialmente por Amartya Sen
[1]. Al hacer un sumario análisis de los componentes de este índice, noto una relación de causalidad importante: ¿Cómo se llega a tener un ingreso digno? ¿Acaso no es por la capacidad de la persona para desarrollar su trabajo? Esto es lo que sucede en la actualidad, en sociedades flexibles los salarios no son fijados por el estado sino por las empresas sobre la base de la calidad del individuo, vale decir por su productividad, y como es lógico, esta es desarrollada fundamentalmente por la calidad de educación o habilidades que adquiera. Una vez que posea un ingreso digno podrá tener una esperanza de vida mayor al tener los recursos para invertir en salud, alimentación. Entonces queda claro que la educación es el componente principal o causal de los demás, en términos relativos y dinámicos.

Entendiendo la dimensión de la importancia del nivel de educación de una persona, entonces es claro en lo que se debe mejorar en una nación, en lo que se debe invertir para que esta tenga un futuro.

Un diagnóstico sumario de la educación en el Perú.
Según el World Economic Forum, el Perú se ubica en el puesto 131 de las 131 naciones encuestadas (¡Etiopía nos gana!)
[2]. Para poder apreciar mejor el sistema educativo, revisemos algunos resultados de estudios sobre la educación, comprendiéndola fundamentalmente a dos niveles: el que se consigue en los colegios y el de las universidades.

A nivel de colegios, mediante un estudio organizado por la UNESCO a través del Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación (LLECE), donde participaron doce países, el Perú ocupó los puestos 10 y 9 en lenguaje y 12 y 11 en matemática, así como la obtención de una preocupante perfomance en comprensión de lectura, con el 54,1% de los alumnos que no entienden absolutamente nada de lo que leen, elaborado por la organización de cooperación y desarrollo económicos (OCDE)
[3].
Cabe resaltar que los resultados de las evaluaciones tiene un alto grado de relación con el nivel socioeconómico del estudiante, el nivel del profesorado (que es muy deplorable) y el método de enseñanza per sé, donde también se tienen grandes falencias, ya que por ejemplo en la materia o curso de lenguaje no se incentiva a la imaginación sino a la repetición, mecanización como por ejemplo escribir una misma palabra en varias hojas, es decir una baja demanda cognoscitiva de comunicación, lo mismo sucede con la tan importante matemática, donde se enfatiza o lo único que se enseña son procedimientos algorítmicos como por ejemplo de suma o resta en vez de enfatizar en el desarrollo de argumentos matemáticos para justificar respuestas.

A nivel de universidades (en Sudamérica), el Perú no figura en el rubro de pregrado, mucho menos a nivel de postgrado. Esto es lógico, pues la base es la educación primaria y secundaria, si esta está tan mal, qué se puede esperar de los niveles superiores. Las universidades estatales se encuentran reiteradamente en huelgas, con profesores de poco nivel de actualización, y con muchos problemas ya conocidos como por ejemplo el ínfimo presupuesto que manejan.

Ahora, viendo a nivel de cobertura de la educación, desde tiempos del Virreinato, la educación sigue siendo un privilegio en el país, un privilegio de la riqueza que se muestra en todos los niveles de la educación. Según estudios de la ONU, los alumnos de colegios privados obtienen mejores resultados de evaluación que los de colegios estatales, y a nivel de universidades sucede casi lo mismo, por lo tanto el acceso a una educación digna sólo es privilegio de muy pocos en un país tan desigual como este.



Viendo el cuadro, se aprecia un incremento del número de universitarios, sin embargo el porcentaje de los que están en universidades privadas ya casi alcanza al de las estatales, siendo este dato del año 2003, podemos suponer incluso que ahora el privado ya superó al público por la expansión del número de universidades privadas y la acogida que tienen. La gran desigualdad de la educación en el Perú se puede apreciar claramente incluso dentro de las universidades públicas, ya que los que pueden acceder a estas son las personas que tienen la capacidad de pagar una previa preparación para ingresar, ya que la enseñanza del colegio público es muy insuficiente para conseguir una vacante. Adicionalmente a esto, encontramos una expansión cada vez mayor de las “pre” en las universidades públicas, acentuándose aún más la desigualdad en la educación, ya que no sólo se da a nivel de universidades (calidad estatal inferior a la calidad privada), sino también a nivel interno de la universidad pública (sólo ingresan los que pueden pagar una preparación para ingresar).

Política del Sector
“En pleno siglo XX no tenemos aún un plan de educación nacional. Las experiencias políticas a las que hemos estado condenados han reaccionado cada una a su manera sobre la enseñanza”
[4]. Esta frase de un francés estudioso de la escuela en Francia es también cierta para el Perú, a diferencia de que ya estamos en pleno siglo XXI.

Existe un proyecto educativo nacional (PEN) desarrollado por el Consejo Nacional de Educación (CNE)
[5] que ya ha sido asumido como Política de Estado hasta el 2021 por el gobierno de Alan García, pero que a mi entender no pasa de un acuerdo más que queda en el papel, ya que no se comienza por lo más fundamental, que el mismo prometió que haría cuando era candidato: aumentar el presupuesto para el sector educación.

El presupuesto que recibe el sector es ínfimo para poder desarrollarlo como se debe, a nivel de Sudamérica nos encontramos en la cola de los países con menores porcentajes de asignación al sector, incluso del año 2004 al 2005 este bajó, una muestra de que el gobierno de Alejandro Toledo también cayó en el error de menospreciar a un elemento tan fundamental del desarrollo del país
[6]. Parece que ningún gobernante puede darse cuenta de la magnitud de la importancia de este problema en la actualidad, y se sigue haciendo vigente la frase de Herriot. El gobierno de turno se preocupa más por el shock de inversiones y no se dan cuenta que nada poco o nada puede hacer un analfabeto con unas buenas carreteras o buena infraestructura, es como tener una calculadora y no saber utilizarla.

Conclusión

La fuente de riqueza de un país radica en su gente, por lo tanto todo estado debe apuntar fundamentalmente a propiciar oportunidades de desarrollo de los ciudadanos. La educación es la principal herramienta de una persona para desarrollarse en la sociedad actual, por lo tanto es obligación de un estado crear las condiciones para que la educación sea la mejor posible.

Cuando tengamos un gobierno que realmente se preocupe por el sector educación, establezca y ejecute un verdadero plan de desarrollo que vaya de la mano con el debido presupuesto, acabe con los óbices de la implementación (léase SUTEP) y asuma los costos de llevarlo a la realidad, podremos tener confianza sobre el futuro del País, mientras tanto el país se seguirá yendo en espiral hacia un hueco sin salida y los gobiernos de turno seguirán asumiendo el costo histórico de sus malas medidas en el sector.


[1] Amartya Sen, Opción, bienestar y medidas (Choice, Welfare and Measurement), Oxford, Basil Blackwell, 1982
[2] Carlos Basombrio, Perú 21 Domingo 11 de noviembre del 2007.
[3] Grade, Análisis & Propuestas, contribuciones al debate sobre formulación de políticas públicas, 29 de agosto del 2006.
[4] Edouard Herriot, Creer, p.125
[5] “CátedraPerú”, suplemento especial, 10 de junio del 2007.
6 Diario La República, 25 de Septiembre del 2004.

8 comentarios:

Raymundo Reynoso Cama dijo...

Quiero incoar mi comentario manifestando que la Educación es la principal herramienta de superación nacional. Pero esa herramienta necesita de un constante mantenimiento para poder cumplir con su cometido. Ese mantenimiento consiste en brindar a todos los involucrados en el hecho educativo: padre de familia, alumnos y profesores, todas las facilidades para obtener resultados alentadores que sean profícuos al interés personal y al bienestar social. en ese orden de cosas, el padre de familia debe tener un buen trabajo estable, que si por su cuenta no lo tiene, el Estado debe proporcionarle directa o indirectamente, creando más fuentes de trabajo. el alumno debe estar bien alimentado, el profesor bien preparado y bien pagado para poder solventar su constantes actualizaciones. Para que el Estado tenga recursos económicos suficientes para poder brindar oportunidades de trabajo a sus gobernados, debe administrar sus principales recursos naturales que dan más dinero y no darle en concesión ni venderlo al capital privado, por que a ellos no les interesa tanto el porvenir de nuestros compatriotas, por que esto solo es incumbencia del Estado. Además, si los estudiantes peruanos rinden menos que los estudiantes de otros países, es por que sencillamente se les cansa con muchas asignaturas que en nada ayudan a su preparación. Están en total desventaja por que en otros países llevan solo las materias esenciales que les van a servir en su futura profesión y especialidad, que al fin y al cabo eso es lo que le interesa a la sociedad: tener profesionales especializados en una materia y que sean eficientes. Por otro lado, la experiencia me dicta que: No es tanto que el alumno salga de la secundaria mal preparado, sino que en las universidades se inventa cada pregunta rebuscada, que solo en las academias se enseñan. Y si es que el profesor de secundaria, se pone a esa altura y prepara a sus alumnos como en las academias, entonces las universidades se las ingenian para crear nuevos tipos de evaluaciones a fin de que los postulantes desaprueben, esa es la gran verdad. Lo importante sería que el ingreso a las instituciones educativa superiores sea libre y que repita en el primer año todo aquel que no esté bien preparado, pero todos tendrían una oportunidad y no como ahora sucede que solo los que tienen dinero pueden intentarlo. COMPARTO CON LO EXPUESTO EN ESTA PÁGINA, SOLO UNA NUEVA MENTALIDAD DE NUESTROS GOBERNANTES HARÁ QUE EL ESTADO ASUMA SU VERDADERO PAPEL DE ASISTENCIA EFECTIVA EN LA EDUCACIÓN DE NUESTRA JUVENTUD, QUE INVOLUCRA SU BIENESTAR INTEGRAL, ES DECIR OPORTUNIDAD DE BUENA ALIMENTACIÓN Y BUENA SALUD FÍSICA Y MENTAL, TENIENDO MUCHO QUE VER CON SU SITUACIÓN ECONÓMICA PARA PODER LOGRARLO. GRACIAS POR LA OPORTUNIDAD.

Anónimo dijo...

Opino lo mismo que Raymundo Reynoso Cama: Muchas asignaturas llevan nuestros estudiantes desde la primaria, secundaria y superior. Existen asignaturas que deben ser consideradas como cultura general y no deben ser calificadas para que el estudiante peruano, que de por sí es débil por su pésima alimentación, pueda tener más tiempo para dedicarse a las asignaturas, como matemáatica, química, física ciencia, biología, etc. los que ayudarían a su carrera profesional. Por llevar tantas asignaturas es que tenemos profesionales mediocres que salen de la universidad sin saber nada, recién con el trabajo van aprendiendo....eso no es justo, lo que necesitamos es que el estudiante estudie solo lo necesario, es decir los de su especialidad. ES FÁCIL ECHAR LA CULPA AL PROFESOR O AL ESTUDIANTE DEL FRACASO ESTUDIANTIL, PERO LO CIERTO ES QUE EL VERDADERO CULPABLE ES EL GOBERNANTE QUE LES TOCA ESCOGER UN SISTEMA EDUCATIVO Y QUE EN CASI TODOS LOS CASOS, POR NO DECIR EN TODOS, SE EQUIVOCA Y ELIGE EL MENOS EFECTIVO Y APROPIADO PARA NUESTRA REALIDAD PERUANA. NO DEBEMOS COPIAR LOS SISTEMAS DE OTROS PAÍSES DESARROLLADOS, ELLOS CONSTITUYEN UNA REALIDAD DISTINTA A LA NUESTRA.

Anónimo dijo...

SI...MUCHAS ASIGNATURA PERJUDICAN LAS MENTES DE LOS ESTUDIANTES...EL QUE MUCHO ABARCA POCO APRIETA....EL QUE MEJOR SE ESPECIALIZA, MEJOR SERVICIO BRINDA.

arturo dijo...

SI, CONCUERDO CON TODOS USTEDES: MENORAR LAS ASIGNATURAS YA SEA EN PRIMARIA, SECUNDARIA Y EN LA UNIVERSIDAD, SERÍA LO IDEAL, PARA QUE EL ESTUDIANTE TENGA MENOS CARGA PARA PODERSE DESEMPEÑAR MEJOR. EN UN PAÍS EN DONDE LOS ESTUDIANTES ESTÁN MAL ALIMENTADOS, NO SE LES PUEDE SATURAR DE ASIGNATURAS QUE EN NADA VAN A CONTRIBUIR A LA FORMACIÓN PROFESIONAL CON LO QUE VAN A VELAR POR SU PORVENIR PERSONAL Y EL DE LA SOCIEDAD EN QUE SE VAN A DESENVOLVER. LA CULTURA GENERAL SE CONSIGUE EN LOS INTERNET, EN LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN.

albert nefi dijo...

Efectivamente, muchas asignaturas que no sirven para nada, deben desaparecer, para que el estudiante pueda aprovechar mejor el tiempo para preparase más en las materias que le van a servir para la carrera que elijan.

josé dijo...

Hace tiempo que los congresistas debieron sacar una ley que disminuya las asignaturas en todos los niveles educativos, primaria, secundaria y superior. Solo así el estudiante peruano podría mejorar su preparación. En la actualidad salen mediocres por que llevan muchas asignaturas que aburren la mente y no colaboran con su buena preparación.

Anónimo dijo...

los que me antecedieron estan en cierta medida en lo cierto; las asignaturas son demaciadas. entonces tenemos que hacernos otra pregunta ¿para que deben prepararse nuestros alumnos? acaso para ser tecnicos, para ser operarios es decir solo nos remitimos a esos aspectos de profecionalizacion. y que hay de los alumnos que quieren ser profesores, psicologos, abogados... les decimos que ya hay demaciado y por lo tanto ustedes ya no tienen espacio.
de lo que se trata es crear en ellos una conciencia de su realidad, que puedan dicernir y elegir sobre su futuro, ser actores de su propio destino, que se comprometan con ellos mismos y a los profesores no toca ayudarlos en esa tarea.
por que sino caeremos pues en el tecnicismo,es decir, en lo que ustedes estan criticando y mañana diremos que en los colegios estatales y por tanto en las universidades no se enseña nada.
¿el problema sera los cursos que lleva el alumno? ¿o quiza los principios educativos que hoy se imparte? ¿cuantos de los que nos dedicamos a la educacion estamos de acuerdo con los fines y principios educativos?
esto ultimo tambien merece un analisis...
bueno me deespido agradeciendo el espacio y ojala pueda ser un aporte por tratarse de mi experiencia directa.

Anónimo dijo...

seria buen punto menorar asignaturas, pero cada asignatira tiene objetivos especificos, hablariamos de omitir religion y educacion fisica, pero para lios alumnos es necesario desarrollar habilidades distintas, el alumno no puede ser solo una maquina para resolver problemas tambien tiene creencias, el ser humano debe desarrollarse espiritual, fisica y psicologicamente